febrero 04, 2009

UNA NOCHE MÁS...


Hoy al terminar la jornada, después de un guarache del Chupiri, tomé un disco y lo escuché. “finding it so hard” el título del track. Cruel melancólica y apegada a como me siento.

Yo no quería pero lo hice de nuevo. Recurrí a mi “baúl” de libros y tomé uno; ESE MALDITO YO, obra de E. M. Cioran que en tantas noches de desgarrador sentimiento y litros de lágrimas me hizo tanta compañía al borde del suicidio. Encontrando regazo para acurrucarme en sus álgidas paginas me he topado con sentimientos enterrados, hitos del pasado que se suponía estaban bajo llave y tres metros bajo tierra, más no es así. Mi fragilidad resurgió de las más ondas entrañas de la noche y la desesperación me hizo presa, lágrimas y sollozos casi incontrolables. Gritos de odio a mi mismo, reproches por tan tremenda facilidad para dejarme abordar por el pasado, por lo que no debió ser y fue.

Cioran tiene, como lo describo yo, un sazón especial, es un fuerte pilar en mi idea de vivir el sufrimiento, de meterse en él para poder conocer los límites propios y poder hacer temblar todo lo que somos. Acto seguido, salir de dicha experiencia y asirnos nuevamente a algo “seguro”, que resista o contenga los embates.

Por otra parte, según él, había pocas cosas más terribles que haber nacido y esa idea era tan desmesurada. Después de todo “Nos echan a este mundo, y nadie nos ha preguntado si queríamos nacer, nadie nos previene de lo que nos espera, ingenuo pensamiento el que dice que la vida es un don, algo que deberíamos agradecer cada día que nos despertamos y cada día que pasamos y seguimos aquí...

No hay comentarios.: