octubre 07, 2005

otro día no muy distinto a los demás...

Por qué es tan difícil andar el sendero, en veces esta pregunta me mata literalmente. Las cuestiones que parecen desapercibidas por los demás a mí me roban el sueño y me llenan de una especie de incertidumbre que carcome mis huesos lentamente, debilitando mi estructura.

Con respecto a mi relación con el mundo, puedo decir que si bien no lo entiendo completamente, al menos el pequeño pedazo que de él camino, creo conocerlo bastante bien, sin embargo, las personas a mi alrededor me resultan completos extraños. Algunas de esas personas han estado ahí por años y ni siquiera puedo saber si algo anda mal o si peor aún, algo que he dicho o hecho les lastima tanto como a mí el existir.

Creo que no es momento de decir nada, el silencio en este momento puede ser lo mejor y la soledad, esta pedante pero deliciosa soledad, una vez más será la vía del olvido y así podré conciliar el sueño para mañana existir sin desear hacerlo...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jejej, me pasa algo similar, en realidad nunca puedo cerrar un vinculo con nadie, nadie creo, me llega a conocer realmente...
la sensación de no pertenencia pesa por momentos tremendamente, me ha quitado muchos momentos de felicidad, muchas oportunidades, y por momentos ultimamente trato de salir de este estado soporifero, prestar atención a mi entorno, crees que es cierto que los mas desesperanzados fueron alguna vez personas llenas de ilusiones, ¿que nos mantiene entonces? ¿un ultimo cateter que nos alimenta esporadicamente?
no lo sé, no sé si estoy convaleciente o agonizando, no sé por que intento recuperarme.